¿Cómo saber si tu hijo sufre de bullying?

El bullying en tus hijos

El bullying o el acoso escolar es un fenómeno alarmante que puede afectar de gran manera el bienestar físico, psicológico y emocional de tu hijo o hija. En muchos casos el bullying puede involucrar amenazas a los niños, lo cual los detiene de contar a los padres o docentes por lo que están pasando. Cuando los niños se sienten intimidados, prefieren evitar hablar del tema. Como padres y madres, es necesario mantener una sana comunicación con tu hijo para evitar esto, además de conocer las señales que indican que podría estar sufriendo de bullying. 

Cambios de humor 

Si notas que últimamente tu hijo o hija se muestra más triste, estresado o ansioso que de costumbre es posible que algo esté pasando. Cuando los pequeños sufren de bullying, no es raro que tengan repentinos cambios de humor sin razón aparente o que se muestren más sensibles a situaciones en las que normalmente no reaccionarían. Presta atención si tu hijo o hija se pone tenso o reacciona de manera negativa ante pláticas que involucren la escuela o si se niega a hablar de cómo le va. 

Baja en el rendimiento escolar 

Cuando los niños sufren de bullying, les cuesta concentrarse en otra cosa que no sea su acosador o lo que les pueda hacer una vez terminen las clases, lo cual contribuye a que su rendimiento escolar disminuya. 

Insomnio

El insomnio es otra consecuencia del acoso escolar. Cuando los niños sufren de bullying sus mentes están plagadas de preocupaciones e inseguridades, lo cual les impide tener un buen sueño durante las noches. Si tu hijo comienza a tener insomnio de manera repentina puede significar que está pasando algo de lo que todavía no te das cuenta. 

Baja en el autoestima

El bullying y la intimidación dañan de gran manera el autoestima infantil. Al ser ridiculizados o incapaces de defenderse comienzan a dudar de si mismos. Por eso es importante que prestes atención a la manera en que tu hijo o hija se refiera a sí mismo. 

Evita las redes sociales

El bullying no necesariamente termina cuando tu hijo o hija regresa a casa, también podría ser víctima de ciberbullying. Presta atención a sus reacciones cuando esté navegando la red, especialmente redes sociales, y cómo se comporta después de recibir una llamada o un mensaje de sus compañeros.